En TikTok, basta un video viral para que un suplemento pase de ser un producto desconocido a convertirse en la solución definitiva para dormir mejor, bajar grasa, ganar músculo o tener la piel más luminosa. El problema es que muchas de estas recomendaciones se impulsan por tendencias, no por evidencia. Para quienes buscan mejorar su bienestar sin caer en compras impulsivas, entender cómo evaluar un suplemento se vuelve esencial.
Lo primero es tener claro que ningún suplemento funciona igual para todas. Las necesidades varían según actividad física, historial de salud, niveles hormonales, alimentación, estrés y hasta calidad del sueño. Por eso, antes de comprar cualquier cosa que aparece en tu For You Page, conviene revisar tres elementos básicos: qué contiene, para qué sirve realmente y si tu cuerpo lo necesita.
Un criterio clave es verificar la lista de ingredientes. No basta con leer la palabra “colágeno”, “magnesio” o “probióticos”; hay múltiples tipos, calidades y concentraciones. Por ejemplo, ciertos magnesios (como el glicinato) se asocian más con relajación, mientras que otros se enfocan en tránsito intestinal. Esta diferencia rara vez aparece en videos virales y puede cambiar por completo el efecto que notes.
Otro punto importante es la dosificación real. Muchos suplementos se promocionan con claims enormes, pero al revisar la etiqueta la cantidad activa del ingrediente es mínima. Es una de las tácticas más comunes de marketing: un envase atractivo, una promesa ambiciosa y una dosis tan baja que difícilmente genera cambios. Si no sabes qué dosis es efectiva, una buena referencia es buscar guías clínicas o revisar recomendaciones profesionales antes de comprar.
La transparencia de la marca también importa. Las empresas confiables suelen mostrar certificaciones, pruebas de terceros y origen de los ingredientes. Las marcas que no ofrecen esta información suelen apoyarse en tendencias, influencers y envases llamativos. No significa que el producto sea malo, pero sí que debes cuestionarlo más.
Luego están las señales de alerta: frases que prometen resultados inmediatos, sugerencias de reemplazar comida por cápsulas, listas interminables de beneficios o envases que aseguran ser milagrosos sin un sólo dato técnico. Incluso los suplementos que sí funcionan requieren constancia y se integran en un estilo de vida equilibrado, no sustituyen hábitos.
@rhaiza._ Ayuda a mantener la masa muscular magra, fortalece los huesos, mejora la energía y resistencia, acelera la recuperación, optimiza el metabolismo y hasta mejora la salud cerebral y el estado de ánimo ❤️🔥🤝🏻 Mi creatina 100% pura @One Sol 🌸
♬ Anxiety - Doechii
Otro error común es buscar suplementación para algo que realmente necesita hábitos, no pastillas. Problemas de energía, inflamación mental, cansancio emocional o sueño irregular muchas veces se regulan mejor con rutinas, ajustes de alimentación y manejo de estrés. El suplemento puede complementar, pero no arregla por sí solo lo que requiere atención integral.
Al final, la meta no es demonizar ningún producto, sino elegir desde el criterio y no desde la presión viral. Un suplemento puede ser útil, pero solo si responde a una necesidad real, está bien formulado y encaja con la etapa que estás viviendo. TikTok ayuda a descubrir tendencias, pero la decisión final merece más información que un video de 15 segundos.