Las poli?ticas que satanizan las comidas engordantes (como subir el precio a los refrescos) podri?an no contribuir a modificar nuestros ha?bitos alimentarios, segu?n una investigacio?n de la Universidad Cornell. Funcionari?a mejor: celebrar las elecciones inteligentes y reemplazar el ?No puedo? por ?No quiero?. Repite: ?No quiero comer esa pizza?.