A medida que seas más rápida y fuerte en la alberca, lucirás un cuerpo más esbelto fuera de ella.
Ejercitas: glúteos y hombros.
Eliminas: 206 calorías a paso moderado (basado en una mujer de 60 kilos).
Hazlo: piensa que tus brazos son un molino. Conforme jalas el brazo de enfrente dentro del agua (la fase del jalón, en el lenguaje de natación), lleva el brazo que está atrás fuera del agua detrás de ti, sobre tu cuerpo y deslízalo nuevamente en el agua (fase de recuperación). Visualiza el eje vertical de tu cuerpo ?una línea que abarca desde la parte más alta de tu cabeza hasta la punta de tu dedo gordo del pie? y mantenlo estable mientras tu cuerpo rota de un lado a otro.
Para la patada: Pon tus pies en punta y patalea desde la cadera y glúteos sin flexionar demasiado las rodillas.
Perfecciónalo: el poder del nado libre se encuentra en la fase del jalón. Para agarrar el agua, en lugar de deslizar el brazo recto hacia atrás, dóblalo de tal manera que forme una letra L, con el codo ligeramente hacia arriba y la mano apuntando hacia el fondo de la alberca. Mantén las manos rectas, como si fueran remos.
Respiración eficiente: mantén un ojo viendo hacia el agua y el otro fuera de ella.
