El bloqueador sólido es igual de efectivo que cualquier otro; continúa leyendo para conocer los detalles de este producto.
Las redes sociales tienen la capacidad de difundir información a miles de millones de personas en cuestión de segundos; poco a poco se han encargado de concientizar sobre los daños que los rayos ultravioleta (UV) pueden causar en la piel, incluyendo melanoma. Como consecuencia, cada vez son más los que buscan métodos efectivos para protegerse de las repercusiones que puede tener la luz del sol en la salud. Es justo en este contexto que el bloqueador sólido, también conocido como protector solar físico o mineral, se han convertido en una opción ideal y confiable para aquellos que suelen exponerse a los rayos del sol en su día a día.
¿Qué son los bloqueadores sólidos?
Este tipo de bloqueador solar se compone de ingredientes como óxido de zinc o dióxido de titanio, razón por la cual también se le llama protector solar mineral. Se caracterizan por crear una barrera física sobre la piel para bloquear y desviar los rayos UV, por lo que reflejan y dispersan la radiación solar, a diferencia de los bloqueadores “químicos”, los cuales penetran la piel y actúan como una especie de esponja que absorbe los rayos del sol.
La eficacia inmediata es, muy seguramente, el más grande beneficio del bloqueador sólido. Los bloqueadores químicos necesitan que pase un periodo de tiempo (entre 15 y 30 minutos) para ser absorbidos por la piel antes de ofrecer protección, a diferencia de los bloqueadores sólidos, que comienzan a actuar desde el primer momento en que se aplican. Esto resulta ser de gran utilidad para las personas que pasan mucho tiempo al aire libre y disponen de poco tiempo antes de salir de sus hogares.
La protección que ofrecen es de amplio espectro, pues funcionan tanto para los rayos UVA (que son los responsables del envejecimiento prematuro) como los UVB (que traen como consecuencia las quemaduras solares).
Podrás encontrarlos en dos tipos de presentación: crema y barra. La crema es excelente para extenderlo rápidamente por todo el cuerpo, mientras que el de barra es ideal para aplicarlo en zonas muy específicas, como los labios o el contorno de los ojos.
¿Bloqueador solar o químico?
Si bien es cierto que el protector solar químico también posee un gran rango de protección contra el sol, los bloqueadores físicos son perfectos para aquellos de piel sensible o propensa a alergias, pues generalmente no contienen químicos potencialmente irritantes, por lo que son menos propensos a causar reacciones alérgicas o irritaciones en la piel.
Recuerda que el uso de bloqueador no está limitado a la playa o viajes al exterior; es mejor utilizarlo siempre que estés consciente de que te expondrás directamente a la luz de sol.
