Suaviza las zonas ásperas

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Consigue que tu piel sea suave y luminosa.

Puede ser particularmente problema?tico en invierno, cuando el aire fri?o y seco succiona la humedad de la piel. Busca una locio?n o crema corporal que contenga glicerina, petrolato o dimeticona. Para un mejor resultado, elige un producto que tambie?n tenga un poco de alfahidroxia?cido: abre el camino a los ingredientes hidratantes al eliminar las capas muertas de la epidermis.

Cualquiera que sea la fo?rmula que utilices, sigue estos pasos para obtener la mayor hidratacio?n por la menor inversio?n:

1. Toma un ban?o de tina o de regadera primero

Regula la temperatura del agua a tibia ?caliente puede resecarte? y limita tu tiempo bajo el chorro del agua o en la tina a 10 minutos.

2. Al secarte, dale palmadas a tu piel, no te frotes

Se trata de secar los riachuelos que corren por tu cuerpo, no de desaparecer todas las gotas. Tu piel debe quedar un poco hu?meda.

3. Aplica generosamente tu locio?n o crema corporal de inmediato

Si esperas ma?s de cinco minutos, perdera?s la ventana de oportunidad de atrapar la mayor cantidad de humedad.

4. Presta especial atencio?n a tus rodillas y codos.

Los codos en particular suelen rozar contra las superficies (tu escritorio, por ejemplo), lo cual favorece la creacio?n de ce?lulas muertas y capas de piel a?spera. Las lociones que contienen lactato de amotino o urea, son ideales. Apli?cala cada tercer noche para suavizar la piel. De manera alterna, usa un ungu?ento hidratante intenso. Y si persisten la resequedad y la comezo?n en tus codos, visita a tu dermato?logo para descartar psoriasis o eczema.

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