Es el fin del día y tu espalda está rígida. Básicamente estás caminando como Frankenstein. Así que le das un buen golpe, y ahhhhh, dulce, dulce placer. Pero no puedes evitar preguntarte: ¿Es malo tronarte la espalda? Relacionado: “Posturas de oficina”
¿QUÉ SUCEDE CUANDO ESCUCHAS ESE “CRACK”? Nuestras articulaciones están formadas por tendones y ligamentos, y tenemos cartílago en el medio que ayuda a que todo se deslice y se mueva suavemente. Cuando aplicas presión a sus articulaciones torciendo o agrietando su espalda, libera gas (es el sonido de chasquido que escucha). De vez en cuando, está bien, pero el agrietamiento diario puede causar que el cartílago se desgaste, lo que puede causar dolor o posiblemente desgarros de tendones y ligamentos.
Fuente: Armin Tehrany, cirujano ortopédico y fundador de Manhattan Orthopedic Care