¿Qué hacer después de un terremoto?

sad.jpg

Muchos sabemos que hacer cuando la tierra comienza a moverse, caminar despacio, no empujar, no gritar y mantener la calma. Pero, qué sucede cuando ya pasó el temblor, los meses e incluso los años y al escuchar la alarma sísmica o sentir que el suelo se mueve detonas lo que viviste antes. Eso puede ser estrés postraumático. ¿QUÉ ES EL ESTRÉS POSTRAUMÁTICO? “El trastorno de estrés postraumático (TEPT) es una enfermedad real. Puedes sufrir de TEPT luego de vivir o ver eventos traumáticos como la guerra, huracanes, terremotos o un accidente grave.” Según la biblioteca nacional de Estados Unidos. “El trastorno de estrés postraumático hace que te sientas estresado y con temor luego de pasado el peligro. Afecta tu vida y la de la gente que te rodea. Los problemas más comunes que causa son: Flashbacks o el sentimiento de que el evento está sucediendo nuevamente, dificultad para dormir o pesadillas, sentimiento de soledad, explosiones de ira y sentimientos de preocupación, culpa o tristeza”. ¿QUÉ HACER ANTE ESTO? El estrés postraumático puede ser tratado y es un proceso largo que te dejará con una paz y tranquilidad que no habías sentido en mucho tiempo. El tratamiento debe ser realizado por un especialista, es decir un psicólogo capacitado con quien puedas hablar y seguir un tratamiento semana a semana. Es importante que no dejes pasar esta situación como: “algo que todos tienen”. Algunos expertos creen que muchas personas que sufrieron el sismo de 1985 en México, aún reviven ese trauma al escuchar la alarma sísmica, ya que no acudieron a un tratamiento clínico. Como mencionamos antes es importante en estos casos el acercarse a un especialista y poder seguir una terapia, en México tenemos un gran deficit de atención en el área de la salud mental, de hecho, sólo 1 de cada 5 pacientes tienen accesos a salud psiquiátrica, esto se eleva en un tratamiento psicológico, dado a la falta de recursos y al poco interés de la sociedad en querer tratarse. Si cuentas con seguro médico puedes acercarte a un profesional y lo más probable es que el tratamiento sea una terapia de conversación, es decir, que hablarás de lo que te sucedió en el evento traumático. Ésta terapia incluirá el eliminar sensaciones y culpas (que en caso de un terremoto, no son tuyas) de acuerdo a la psicóloga y terapeuta familiar Chayo Busquets “Tener un duelo es lo principal, no importa como sea, pero ten el duelo, recuerda lo que pasó, ten una ceremonia si así lo deseas, al final una perdida material o humana es una pérdida y es válido el llorar”. De esta forma cerrarás ciclos y no continuarás castigándote. “Este proceso te ayudará a soltarte y podrás continuar los pasos del duelo poco a poco” explica Busquets “El recordar nos da un marco donde la gente que perdiste merecen un reconocimiento y que los extrañas,” concluye Chayo. LA RESILIENCIA EL PASO A MEJORAR El dolor nos ayuda a crecer y a mejorar, no, no nos referimos a que sufras y te flageles con todo lo que pasa en el mundo, al contrario, es sacar lo mejor de nosotros mismos después de algo que sufres (una ruptura amorosa, un despido o un descontento con tu familia). De acuerdo a la terapeuta Rosa Barocio las pérdidas y los golpes de la vida forman un carácter más fuerte y resiliente, es decir que tendrás la capacidad para adaptarte positivamente a situaciones adversas. Esto no está peleado con el dolor que sientes al perder seres queridos en una catástrofe, al contrario te ayudará a continuar viviendo. En resumen si tienes la duda de que podrías tener estrés postraumático es importante que lo platiques y veas a un especialista para que te ayude a tener una mejor calidad de vida y sobretodo tener paz mental.

También te puede gustar:
Las mujeres sufren mayores afectaciones a la salud por las infecciones de trasmisión sexual
Además del mal aspecto, los talones agrietados pueden ser señal de otros padecimientos...
Basta con un pequeño, pero poderoso ritual para mantener lejos de ti a las personas que te envidian
Los abrazos son una de las “prácticas neurofelices” para hacer frente al estrés y a la ansiedad imperantes en nuestro día a día