Es posible que tus extremidades protesten su agotamiento a través de callos, dedos acalambrados y dolores punzantes. Y desafortunadamente para las fanáticas de las sandalias, los juanetes nunca han estado de moda. Continúa leyendo para descubrir qué necesitas saber para reparar el daño que les has hecho y buscar el bien para tus pacientes y trabajadores pies.
1/ Bulto huesudo, mejor conocido como juanete
Su apariencia: Una bolita en la parte exterior de tu dedo gordo.
Se presenta cuando: La articulación más baja se re alinea, provocando que el final del hueso se salga. A pesar de que los tacones punteados y angostos hacen que los juanetes sean más dolorosos, los zapatos no son la causa de su aparición. Hay otros factores más determinantes como la forma de tus pies y la manera en que caminas.
Cómo lidiar con ellos: Compra zapatos hechos de material flexible, como piel, para que se adapten a las curvas de tu pie. El uso de plantillas fabricadas a la medida por un podiatra, puede evitar que los juanetes empeoren.
2/Pies de gallo, mejor conocidos como Dedos en martillo
Su apariencia: La articulación de uno de tus dedos (por lo regular el segundo) se empunta hacia arriba en lugar de estar plano.
Se presenta cuando: Un juanete, un arco plano o alto, o unos zapatos muy angostos pueden provocar que tu dedo gordo empuje al segundo, presionándolo y haciendo que se contraiga.
Cómo lidiar con ellos: Una tablilla Budin (un colchoncito de espuma con un aro elástico queva debajo de la planta del pie y envuelve el dedo de martillo) puede reducir la presión y la fricción de los zapatos.
3/ Antiderrapantes mal puestos, mejor conocidos como callos
Su apariencia: Capas elevadas de piel muerta y gruesa. En la parte superior de los dedos de tus pies se llaman callos; en la parte inferior o lateral, callosidades.
Se presentan cuando: Hay mucha presión o fricción en los pies, normalmente debido a zapatos de mala medida o a alguna deformidad como el pie de martillo.
Cómo lidiar con ellos: Una o dos veces a la semana, en la ducha, raspa suavemente el área con una piedra pómez hasta que la piel empiece a ponerse rosa. Continúa con una crema diseñada para suavizar la piel con callosidades.
4/ El infierno en los talones, mejor conocido como fascitis plantar
Se siente como: Una quemazón o un pinchazo en el talón que suele ser peor en las mañanas.
Se presenta cuando: La fascia plantar, una tira de tejido que va del talón a la bola del pie, se inflama. Las causas de esto varían entre tener arcos muy planos o altos, pararse o sentarse todo el día, padecer sobrepeso o realizar actividades físicas de mucha intensidad.