Todos los días cientos de pensamientos negativos pasan por tu mente y es momento de dejarlos ir. Enfrenta la realidad de tu ser y deja de pensar que no eres digna de todo lo que la vida te puede ofrecer. Encuentra tu voz interior y confía en ella. De niña mi mis padres me dijeron que lo único que importaba era estudiar, salir adelante con inteligencia y aprender, aprender, y aprender todo lo que pudiera. Lamentablemente sus consejos me llevaron a preocuparme por todo lo académico y a dejar fuera todo lo demás. Con la edad, las voces que te dicen que eres el sapo del cuento comenzaron a llegar, cosas como “nunca te va a hacer caso”, “no puedes”, “nada va a cambair” o “estás muy gorda”, y no han parado desde entonces, y aunque a todas nos pasan, en el momento exacto en el que decides no escuchar es cuando ves las cosas desde otra perspectiva, no para descubrir mágicamente que eres una Princesa, sino que eres tú, sólo tú. Para bien (nunca para mal), eres tú propia compañera, la persona con la que tendrás que vivir por siempre, de la que nunca te debes aburrir y obviamente a la que nunca le debes decir cosas horribles como esa. ¿TE ENAMORARÍAS DE TI? Aunque no siempre nos vaya bien en el amor, la verdad es que todas nos hemos enamorado, y cuando estamos enamoradas vemos a la persona como la más bella, talentosa, maravillosa y perfecta en la tierra, y por ello, le entregamos todo lo bueno que hay en nosotros, al grado que sólo la llenamos de regalos, palabras bonitas y atenciones, pero entonces ¿no podemos hacer eso por nosotras? ¿no podemos enamorarnos de nosotras mismas como de los novios o novias? Muy dentro de ti mientras lees este texto estás diciendo “sí, claro que sí", y por ello te voy a contar todo lo que he leído y aprendido para que ese “sí" se convierta en una realidad y no en un sueño. NO SOY UN FRACASO. Cuando tenía 17 años entré a la universidad. Por alguna locura en mi cabeza pensé que lo que debía hacer era inscribirme a Psicología en una escuela que se especializara en clínica. Aunque no me iba mal la realidad es que lo odiaba, sentía que no era buena para nada y no podía ni dormir pensando en cómo le diría a mis padres que ya no quería seguir. El destino me ayudó y al tener un papá militar lo inevitable ocurrió, nos cambiaron de ciudad a una en donde pude estudiar Periodismo y hacer lo que de verdad quería hacer. Cometí un error y recuperarme de él fue lo mejor que pude hacer, así como con cada equivocación, lo mejor es seguir adelante y no preocuparte por esas voces que te tachan de “fracasada”, ni de las personas que te aseguran que no eres nada sin tal o cual cosa. En su libro Sé Que Puedo Más, la conferencista Alejandra Stamateas presenta un panorama alentador para todas aquellas que luchamos, de una u otra manera, con los mensajes incorrectos que nuestra mente nos manda. “No eres un error, sólo has cometido un error. Si te sientes frustrada en algún área, no eres un fracaso en todas las áreas de tu vida”. El intentar ser a toda costa alguien que no eres se convierte en un pan agrio que te comes cada día y que en lugar de permitirte tener una conexión contigo misma te niega la felicidad, como lo mencionan en el texto: “El problema de los ‘debería’ que no sirven se presenta cuando queremos agradarles a los demás o mantener una imagen. Piensas que, para agradarle a tal persona, tienes que ser de una determinada forma”. Relacionado: “Darte un tiempo de tu relación podría ser bueno” Los pensamientos negativos con respecto a un error vienen con mayor fuerza cuando están relacionados al amor. Pensar que una pareja se fue porque NO FUISTE LO SUFICIENTE o que estás eternamente soltera porque NO ERES SUFICIENTE son cosas que ya no deberíamos de pensar, sobre todo porque el poder de la mujer ha subido tanto que ya no nos conformamos, que ya no somos las mujeres sumisas que decían que “sí" a todos los caprichos de los hombres, razón por la que los hombres podrían estar alejándose de ti, y no necesariamente porque no eres “suficiente”. ¿O crees que Scarlett Johansson no es suficiente? Yo creo que sí, y a pesar de eso ya se divorció una vez, luego de que la engañaron ¡con Blake Lively!, ¿y entonces ahí qué pasó? Estamos hablando de una mujer bella, talentosa, trabajadora, y seguramente mil cosas más. La respuesta es más que clara: NO PASÓ NADA, PASÓ LA VIDA QUE A VECES ES ASÍ. Ella no tiene la culpa, TÚ no tienes la culpa. Las cosas pasan y ya, no pienses más en tus errores, sigue adelante. CONFÍA EN TI MISMA. Una vez que decidiste (porque todo es una elección y una decisión) que ya no vas a escuchar más esas voces, aunque griten, porque eres una Diosa En Construcción, lo siguiente en la lista es tener confianza. Yo tenía 14 años cuando la primera cubeta de “falta de confianza” fría me llegó. Mi crush se llamaba Carlos Porcayo, sabía que jamás se iba a fijar en mí, él tenía 17, yo 14, además estaba gordita y tenía lentes, braquets y todo lo demás. Dos días antes de la graduación le dije lo que sentía, al fin ya no lo iba a volver a ver, me abrazó y me dijo “ojalá me lo hubieras dicho antes, me habría encantado salir contigo”. Desde ese momento me convencí que siempre hay que tener confianza. “Cuando una persona puede confiar en sí misma se atreve a asumir riesgos y tiene iniciativa. Hay muchas mujeres que están abatidas, que no pueden defender lo que es suyo porque les falta autoconfianza. Esta falta de seguridad en sus capacidades generalmente se debe a experiencias negativas que vivieron a lo largo de su vida”, revela Stamateas en otra parte de su libro. Relacionado: “La automimagen y cómo mejorarla” NO ERES TUS PENSAMIENTOS. Hace tiempo me enamoré de un chico que estaba pasando muy duros momentos, tenía a una mamá muy enferma, no estaba trabajando por atenderla, y dicho sea de paso tenía una actitud muy negativa con respecto a su vida. A pesar de que una persona sensata debería haber dejado que pasara todos estos problemas antes de querer involucrarse con él, mis pensamientos decía “pobre, necesita a alguien que lo cuide, porque nadie lo ha cuidado”. Un error que seguramente le ha pasado a miles de mujeres y que hace que nos privemos de una verdadera felicidad, acercándonos a personas que quieran compartir nuestras vidas de verdad, o incluso, quedarnos en situaciones que nos hacen daño sólo por escuchar a esa vocecita que nos está hablando. El ex directivo de Google Mo Gawdat habla de manera muy atinada en su libro El Algoritmo De La Felicidad con respecto a estos pensamientos y asegura que cuando algo es altamente importante tu cerebro (el amo de la vocecita) te pone cosas que no son verdaderamente ciertas al grado de hacerte infeliz si te quedas escuchándolo por mucho tiempo: “Cuando más importante es algo, en mayor grado el pensamiento incesante está excluido de ello. Piensa en ello: la felicidad importa realmente, ¿por qué dejamos entonces que nuestros pensamientos nos lastren y nos priven de ella?”. De igual forma, el escritor plantea que “no somos lo que pensamos”, ni las cosas que te pasan son exactamente como las estás pensando. Tristemente muchas chicas llegan a creer que no son valiosas, que merecen los malos tratos y a las malas parejas únicamente porque sus mentes les dicen una y otra vez “nadie me va a querer, así que mejor me quedo aquí aunque sufra”, algo que no es cierto, porque aunque el mundo entero no te quiera -que repito NO ES CIERTO- tú puedes quererte. “Cuando crees que eres tus pensamientos, te identificas con ellos. En otras palabras, si tienes un pensamiento malévolo, pensarás que eres una persona malévola. ¿Lo comprendes? Pero los pensamientos malévolos no equivalen a una persona malévola. Los pensamientos se presentan ante ti para tu consideración; eso es lo que hace el cerebro. Lo que hagas con esos pensamientos depende de ti. No tienes que obedecer”, comparte Gawdat. Relacionado: “Kelsey Wells contra la talla cero” HAY QUE ESTAR EN LA ZONA, SIEMPRE EN LA ZONA. Al darte cuenta del poder que tienen los pensamientos sobre ti, entiendes que puedes seguir adelante a pesar de las cosas que tu cerebro te esté diciendo. En la Alemania de 1989 la gente pensaba que jamás dejarían de estar divididos, pero hubieron personas que se activaron, se pusieron “en la zona” y descubrieron que a pesar de sus miedos debían derribar un muro, uno que muchos de ellos habían conocido de toda la vida. El resultado fue increíble y hoy es uno de los países más importantes del mundo. Así puedes ponerte e “la zona” y derribar los muros que conoces de siempre. ¿Pero cómo podemos empezar? El escritor Gary John Bishop nos pide entregarnos diariamente y fingir hasta que tengamos una vida feliz. “No tienes que sentir que hoy será tu día; sólo tienes que actuar como si lo fuera. Claro que siempre ayuda tener el ánimo o el pensamiento necesario para lograrlo, pero, si esperas a que mejore tu ánimo, tal vez nunca empieces”. Así como como cada uno de los logros históricos han sucedido, como ya superaste a Joaquín tu amor platónico de la secundaria, así como ya no piensas en ese trabajo horrible que tenías hace años, el meditar sobre las cosas que importan y no tanto sobre los pensamientos que te llegan, te hará salir adelante de cualquier oscuridad en la que estés atrapada. “Cambias tu vida haciendo, no pensando en lo que harás”, nos motiva el autor, y plantea que debemos aceptar que la vocecita no tiene toda la verdad absoluta de lo que nosotros somos. “Los pensamientos sin acciones son sólo eso, pensamientos. Tus pensamientos negativos sobre ti mismo, sobre los demás, o sobre las circunstancias empezarán a dejar de tener poder sobre tú éxito siempre y cuando los dejes donde están”. Es momento de que te entregues por completo a disfrutar de quién eres, a escuchar únicamente las cosas que sabes que son o pueden ser ciertas. ¿Te imaginas que te encontrará en la calle y de la nada te dijera “eres una floja”?, ¿qué contestarías? Seguramente que no te conozco y no sé quién eres, de igual forma puedes dejar de escuchar esas dolorosas palabras que tu voz interna, que seguramente es la suma de mucha gente que a pasado por tu vida y no saben de lo que eres capaz, y poner manos a la obra para ser lo que tú quieras ser. No lo olvides chica Cosmo, eres tú, eres una brillante mujer, no eres un sapo, y tampoco una princesa débil que no sabe hacer nada, eres una inspiración y pronto, muy pronto, serás la mejor versión de ti misma. ¡No te des por vencida! Relacionado: "¿Qué es la epidemia de la soledad?” ¿QUÉ HAGO PARA NO ESCUCHAR LA VOZ NEGATIVA? Es difícil entender de un momento a otro que lo único que debemos hacer para silenciar a esa voz interna es apagarla, por ello te dejamos algunos pasos que nos han regalado expertos para dejar de escuchar eso que nos hace tanto mal. 1. A veces estamos tan acostumbrados a pensar lo negativo que no nos damos cuenta que lo positivo no llega porque no sabemos ni reconocerlo. La psicóloga Andrea Ortega nos invita a hacer una actividad: “primero toma un cuaderno y escribe 100 frases positivas, pueden ser momentos como ‘leer un libro a la semana’ y lleva ese cuaderno a todas partes. Cuando un pensamiento malo llegue ábrelo y repasa lo que pusiste, puede que el pensamiento ‘nada bueno me pasa’ sea fuerte, pero te apuesto que ‘me voy de viaje con un amigo’ lo será aún más”. 2. Debes ser realista, hay pensamientos negativos que te llegan por sentimental y no porque sean una realidad. Ante esto, Tim Herrera del New York Times escribe: “En vez de intentar enterrarlos, debemos apropiarnos de ellos y hacernos preguntas como: '¿hay evidencia detrás de este pensamiento?’ o '¿estoy basando esto en hechos o en sentimientos?’. Un poco de introspección puede ayudarnos a superar los pensamientos que no se van de nuestra mente de otra manera”. 3. Nunca nos cansaremos de decirte que algo que te puede ayudar en el aspecto emocional y en el físico es el ejercicio. Activarse vale más que mil pensamientos. “Los grandes pensamientos le hablan sólo a la gente reflexiva, pero las grandes acciones le hablan a toda la humanidad”, Theodore Roosevelt. 4. Cuando estás a dieta y tienes hambre en lugar de comerte unas papas te preparas una taza de jícama, que aunque no es más rica (tal vez) es mucho más saludable. Por ello Mo Gawdat revela: “En cuanto surja un pensamiento doloroso, pon a tu cerebro a pensar en otra cosa (...) En lugar de pensar en que se terminó una relación, piensa en el tipo relación que quieres empezar”. 5. Toma ese pensamiento negativo y haz lo contrario. Cuando tu cerbero te diga “nunca vas a conseguir esto”, ve y hazlo. Gary John Bishop te aconseja “a veces sólo tienes que darle, decir lo que vas a hacer y echarle ganas”, y en su libro recuerda la frase de Vince Lombardi: “lograríamos más cosas si no pensáramos en ellas como algo imposible”. Relacionado: “Confía en tu voz interior”
