Adelgazar puede ser una palabra fácil de pronunciar pero no quiere decir que lograrlo sea un proceso sencillo. Rompe con estas situaciones típicas siguiendo estos consejos.
No estás comiendo suficiente
ESTANCAMIENTO
Esta es la otra posibilidad: existe algo que se llama comer muy poco para bajar de peso. “El cuerpo necesita un número determinado de calorías al día para cubrir sus requerimientos metabólicos mínimos, tales como la función cardiovascular y la respiración”, señala Mitchell. Cuando vas con el tanque vacío, tu cerebro envía señales a varios órganos vitales (como tu tiroides) y les dice que desaceleren tu metabolismo para conservar energía.
SUPÉRALO
¿Qué estrategia debes seguir? Es sencillo: “Incrementa tu ingesta de calorías”, responde Mitchell. “Muchas mujeres temen hacerlo porque creen que entonces engordarán, cuando, de hecho, su cuerpo funcionará de manera más eficiente y empezarán a perder peso de nuevo”. Si estás estancada (y mueres de hambre), prueba añadir 100 calorías al día a tu dieta por dos semanas.
El nivel de tu rutina está muy fácil
ESTANCAMIENTO
¿Has repetido los mismos movimientos una y otra vez? Necesitas modificar tu rutina. “Cuando tu cuerpo se acostumbra a un ejercicio, deja de hacer cambios fisiológicos”, explica Cassandra Forsythe, científica en nutrición y en ejercicio en la Universidad de Connecticut. Traducción: tu cuerpo se ha vuelto tan eficiente en hacer tu rutina que elimina pocas calorías. Un estudio publicado en el International Journal of Obesity descubrió que las corredoras que no incrementaban su kilometraje ganaban peso después de un tiempo.
SUPÉRALO
Varíalo. “Para formar más músculo y mantener tu tasa metabólica alta, debes dañar un poco los músculos, retando a tu cuerpo con entrenamientos diferentes”, asegura Forsythe. Si te gusta correr en la caminadora, haz elíptica o bici. Si amas la caminadora, incrementa la intensidad (ajustando la velocidad o la inclinación) cada tercer minuto, o recorre más distancia añadiendo un kilómetro cada dos semanas. En la sala de pesas, olvídate de las 15 repeticiones que siempre haces con la pesa de dos kilos. “Disminuye el número de repeticiones e incrementa el peso, utilizando una mancuerna que puedas levantar solo cinco a ocho veces”, aconseja Forsythe.
Eres fanática del ejercicio
ESTANCAMIENTO
Si no das a tu cuerpo tiempo para recuperarse, los kilos dejarán de eliminarse. “Cuando descansas, la fibra muscular tiene la oportunidad de sanar y volver al trabajo más eficiente. Esto acelera tu metabolismo, así que quemas más calorías en descanso”, asegura Angela Corcoran, directora de educación y desarrollo corporativo en la Academia Estadounidense de Entrenamiento Personal en la ciudad de Nueva York.
SUPÉRALO
¡Descansa un día! Tu cuerpo necesita de 24 a 48 horas para recuperarse. Forsythe sugiere ejercitarte dos días consecutivos y luego parar un día. No reposes más de tres días seguidos.
Prueba esta rutina para unos glúteos y abdomen de impacto.
