Cualquiera de estos hábitos podría ser la razón para que tu historia de amor termine. ¡Mucho cuidado!
Sabemos que muchos aspectos que podrían ser considerados como ?deal breakers? pueden ser ignorados, como la edad, el grupo de amigos o la familia.
Sin embargo, existen aspectos que definitivamente afectan tu relación, a tal grado que podrían destruirla.
1. Asumir todo constantemente
Asumir es natural, y lo hacemos todos casi sin darnos cuenta. Cuando tu amiga del trabajo no llega a trabajar el lunes, en automático asumimos que seguro tuvo un fin de semana de fiesta salvaje y el lunes obviamente estaba indispuesta.
Eso también pasa con tu galán, cuando no te responde un mensaje que le mandaste hace horas, automáticamente asumimes lo peor.
Reaccionar ante cualquier señal que no te gusta es entendible y completamente natural, pero asumir que cualquier cosa significa que te está siendo infiel, es algo muy diferente.
Si tu actitud es asumir de manera constante que tu pareja está mintiéndote, siéndote infiel o cosas parecidas, lo único que provocarás es que tu pareja se sienta asediada, atrapada y mal porque no confías en él ni en su amor.
Finalmente lo más probable es que se canse de tu inseguridad y que terminen.
2. No poder abrirte con tu pareja
Una de las claves más importantes para que una relación funcione es la comunicación. Para poder comunicarte, tienes que poder expresar tus sentimientos e ideas con libertad ante tu pareja.
Si él hace algo que te molesta, díselo. Si te sientes diferente por alguna situación, díselo. Si no dejas que tu galán sepa cómo están las cosas contigo y con su relación, no esperes que él lo adivine por arte de magia.
Todo esto sin tomar en cuenta que acumular tus problemas sin expresarlos, te hará sentir con ganas de explotar. Y cuando lo hagas, será siempre peor que si lo hubieras hablado en su momento.
3. No sentirte cómoda contigo misma
Recuerda que la clave más importante antes de poder amar a alguien más, es que tienes que poder amarte a ti misma. De lo contrario podrías verte involucrada en una relación llena de inseguridad, en donde aceptas y toleras situaciones que no te gustan o te hacen daño, sólo por el simple hecho de ?sentirte amada?.
