El sexo “sucio” puede ser una delicia, pero incluso en el calor del momento, hay prácticas sexuales de alto riesgo que debes evitar o seguir las reglas porque pueden ser peligrosas.
Aunque la calentura saqué tu instinto más salvaje (sabemos lo que se siente), hay prácticas sexuales de alto riesgo que debes evitar o hacer con ciertas medidas de higiene, tal como el fisting.
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Para ser más exactas, la lista que estamos a punto de darte está compuesta por prácticas sexuales de alto riesgo, y no vamos a negar que algunas nos parecen una verdadera delicia, pero safety first. No se trata de eliminar el sexo salvaje (la vida perdería mucho sentido), pero sí de hacerlo correctamente.
Fisting
Esta práctica se considera de riesgo porque puede dejar lesiones graves. ¿Qué es el fisting? Se trata de introducir la mano a la vagina o al ano.
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De acuerdo con el Journal of Forensic and Legal Medicine, el 22 % de los encuestados que habían practicado el fisting, tenían lesiones externas en la zona genital o anal después de llevarlo a cabo y mucho de ellos presentaban traumas internos. Pero como en Cosmo prácticamente nada nos asusta, no seremos la miss que te prohiba practicarlo. Los expertos dan tips para hacerlo de manera segura si quieres practicarlo a pesar de conocer los riesgos.
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Primero que nada, es aconsejable realizar una ducha anal entre 2 y 3 horas antes de empezar. Esto te dará más seguridad durante el encuentro y por lo mismo evitará la contracción excesiva de los músculos pélvicos. Por otro lado, quien vaya a introducir la mano deberá tener bien limpias y cortadas las uñas, y de todas formas usar guantes. Ahora sí, llegado el momento de introducirla deberá hacerlo dedo por dedo y escuchar lo que dice la persona que está siendo penetrada.
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Por último, para sacarla debe ser también gradualmente y que los músculos del ano vayan marcando la pauta.
Beso negro
No vamos a satanizar esta práctica que de hecho es bastante común (aunque no muchas personas lo acepten), y esto se debe a que estimular el ano es muy placentero por la cantidad de terminaciones nerviosas que existen. Además es importante prepararlo antes del sexo anal para evitar desgarres y dolor.
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Pero esto no quita que sea de alto riesgo si la zona no está limpia o si la persona en cuestión tiene parásitos. ¿Cómo saber esto? Bueno, no es como que vayas a pedirle a alguien que se desparasite para poder tener sexo, ¿cierto?
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Te recomendamos que no te tomes tan a la ligera el elegir a la persona con la que planeas prácticas un beso negro, aunque la calentura del momento te haga creer que no importa, sí, sí importa.
Double-dipping
Ya sea que hagas un trío o que te penetren anal y luego vaginalmente debes cambiar el condón para cada penetración.
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Sí, sí, sí, hasta leerlo da un poco de flojera pero las bacterias que existen en el ano no son para nada buena idea introducirlas en tu vagina, y mucho menos compartir condón con otra persona.
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Si estás planeando hacer uno, establezcan reglas de higiene. Si sucede en el calor del momento, ten esta información en la cabeza.
Asfixia
Aquí eso de “ahorcarnos poquito” durante las relaciones sexuales nos parece sumamente excitante. El problema es no saber medir ese “poquito”, pues la adrenalina y endorfinas que liberas durante el sexo puede ser engañoso, así que a pesar de dejarte llevar aprende a no pasarte de fuerza o a decirle a la otra persona que baje la presión si sientes que sea e está pasando la mano.
Las famosas palabras de seguridad son una excelente idea en este tipo de situaciones pero lo principal para todas y cada una de las prácticas anteriores es la comunicación.
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La planeación también es otra gran aliada aunque sabemos que de decirlo a hacerlo hay un abismo de diferencia abismal. Todos hemos roto alguna regla por culpa de la calentura y el que diga que no, ¡miente! Sin embargo, para llevar a cabo prácticas sexuales de alto riesgo es importante ser un poco más estrictos con nosotros mismos y los límites.
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