El ejercicio te puede ayudar a aumentar tu autoestima, tener mejor condición física y lucir un cuerpo más estético, pero a veces, puede perjudicar tu actividad sexual.
¿Pero esto es adecuado para ti? En cuestión física y emocional, comprometerte con tu entrenamiento te ayudará a conseguir cada uno de tus objetivos, pero un compromiso extremo puede tener varias consecuencias negativas en tu cuerpo. Con un ejercicio intenso, el cuerpo siente que no es el mejor momento para embarazarse, así que los niveles de estrógeno bajan, y el periodo puede disminuir, lo que puede causar estrés o mal humor.
Así que mejor bajarle dos rayitas a tu intensidad. Para eso solo debes ser honesta contigo misma, y seguir en el mismo nivel de compromiso, pero sin poner en riesgo tu salud. Sin embargo, la pregunta del millón es: ¿cómo mantenerte al cien y todavía tener ganas de tener actividad debajo de las sábanas?
Tu cuerpo (y tu pareja) agradecerán tener algún momento de intimidad, e incluso planearlo será divertido para ambos.
1. No descuides tu descanso: el punto básico para mantenerte al cien. Si tienes sueño? ¿cómo esperas tener energía para el sexo? Aunque es nuestro deber decirte que un poco de acción puede disminuir tus niveles de estrés. ¡De verdad!
2. Delimita tu intensidad: mientras más tiempo pases corriendo, tu práctica sexual puede disminuir. Pero ¿qué pasa con esos días en los que tus entrenamientos no son más intensos? ¡Son los mejores para tener sexo!
3. Ponlo en tu agenda: sí, quizá pensarás que el sexo es mejor cuando es espontáneo, pero piensa en la última vez que tuviste un poco de acción? ¿ha pasado mucho tiempo?