Nada mejor que ejercitarte al aire libre, pero cuando tu respiración se agita necesitas cuidar lo que estás inhalando.
Esto no sólo es un ataque tóxico a tus pulmones que puede afectar la eficacia de tus entrenamientos, sino que también puede causarte algunos problemas de salud.
Correr entre humo. El problema es éste: la gente que se ejercita a la intemperie aún puede respirar hasta 10 veces más contaminantes del aire que aquella que pasa menos tiempo activa fuera de casa. Ya sea que tu elección de entrenamiento consista en correr, hacer ciclismo o ejercitarte en la playa, cualquier tipo de actividad vigorosa al aire libre que te haga respirar agitada implica que inhales más aire que si estuvieras inmóvil. Incluso el ejercicio moderado, como salir a caminar, puede incrementar la cantidad de aire que inhalas. Y junto con todo ese oxígeno adicional.
Tu cuerpo ante un aire contaminado. La contaminación afecta más que sólo tu sistema respiratorio. Cuando respiras contaminantes del aire,tu cuerpo dispara una defensa ante ?invasores externos?, lo que posteriormente provoca inflamación. Con el paso del tiempo, esa inflamación crónica causa estragos en todos tus órganos.
Respira mejor con estas estrategias:
Ejercítate por la mañana. El ozono es más bajo a esta hora, entre las 6 y las 10 a.m.,y se levanta a lo largo del día cuando la luz solar descompone los hidro carbonos de los desechos de los automóviles transformándolos en smog.
Modifica tu ruta. Busca caminos que no pasen por las calles más transitadas. Una calle con tráfico ligero estará menos contaminada que una avenida congestionada repleta de autos parados en semáforos expulsando emisiones al aire. Si no puedes evitar los caminos con tráfico, planea tu entrenamiento de tal forma que el mayor esfuerzo se haga en la parte menos congestionada de tu ruta. Si vives en una ciudad,ve a un parque.
Evita los peores daños. Mantente alejada de los espacios altamente contaminados, como estacionamientos y paradas o bases de autobuses llenos de vehículos que utilizan diesel como combustible, y de áreas en las que haya incendios forestales. Las máquinas para el cuidado de los jardines como las podadoras y las sopladoras también expiden gases que no te conviene inhalar, así que intenta no estar cerca de ellas.
Déjate envolver por la brisa. Los días más contaminados suelen ser los calurosos y soleados días de verano. El viento suele mejorar las condiciones del aire debido a que la brisa esparce la contaminación, reduciendo su concentración
