Hablamos con los expertos para descubrir las verdades detrás de una rutina de ejercicio, ¡conócelas!
MITO 1: “Hay que sudar mucho para perder peso”.
Falso: El ejercicio no es más eficaz por usar fajas reductivas o pasar horas en la sauna. ¡No se trata de sufrir! Si quieres perder peso, sigue una dieta equilibrada y entrena en condiciones adecuadas.
MITO 2: “Si no puedes ir al gym a menudo, ve solo un día y trabaja más”.
Falso: La actividad física no es acumulativa. Lorena Flores, fisioterapeuta especialista en Pilates, asegura que quienes hacen ejercicio una sola vez a la semana con una intensidad inadecuada, a la larga pueden tener problemas del corazón y tienden a lesionarse.
MITO 3: “Sólo haciendo abdominals bajarás la pancita”.
Falso: Para reducir el vientre, hace falta realizar ejercicio y dieta. “Consulta a un especialista en nutrición y asegúrate de llevar una dieta personalizada y de acuerdo a tus necesidades”, afirma Lorena Flores. Practica actividades aeróbicas, como elíptica, escaladora, o bien, toma clases de baile con regularidad.
MITO 4: “Si no comes inmediatamente después de hacer ejercicio, engordas el doble”.
Falso: De acuerdo con Karina Hernández, licenciada en nutrición, comer sanamente luego de hacer ejercicio ayuda a mantener activo el metabolismo y evita que se utilice la proteína de los músculos como energía.
MITO 5: “El cuerpo sigue quemando calorías después de hacer ejercicio”.
Cierto: Una investigación del Hospital General de Massachusetts descubrió que una persona que ha hecho ejercicio durante unos 45 minutos, además de consumir calorías durante ese tiempo, quema 190 calorías extras las siguientes 14 horas después de haber terminado la actividad.
MITO 6: “El ejercicio para bajar de peso no sirve si después comes en exceso”.
Cierto: Todo depende de lo que se consuma luego de hacer ejercicio, porque si comes con inteligencia, no tienes de qué preocuparte. Si quieres reponer fuerzas y necesitas picar algo, opta por pepinos, jícamas o zanahorias con limón.