Si quieres conseguir resultados, toma en cuenta estas recomendaciones
1. Come los alimentos adecuados La comida es lo que nos mantiene de pie. Sin una buena alimentación antes y después del ejercicio, no tendrás la suficiente energía para alcanzar los resultados deseados. Comer algo ligero una hora antes de hacer ejercicio te dará la resistencia necesaria para trabajar mejor y aguantar más tiempo. Antes de entrenar, es recomendable que comas algún carbohidrato (por ejemplo, pan tostado integral) para absorber energía o un plátano para el potasio. Después del entrenamiento, es buena idea cenar pollo para tener vitaminas como el hierro y el zinc. Combínalo con sal en una papa al horno para reponer los electrolitos perdidos a la hora de sudar. Te interesa leer: Recetas de pollo fáciles y rápidas 2. No dejes de hidratarte ¿Te has sentido cansada a la mitad del entrenamiento o con un dolor de cabeza que te impide continuar? Esos son síntomas de deshidratación, y es importante saber que tomar agua es tan esencial como tener una buena alimentación para nutrir al cuerpo antes del entrenamiento. Lo más recomendable es tomar 1 vaso de agua 90 minutos antes de hacer ejercicio y mantenerte hidratada todo el tiempo, intentando tomar 8 vasos de agua al día. Si no te gusta el agua simple no te preocupes? ¡Combínala con frutas y verduras como el pepino, los arándanos y la sandía para darle sabor! 3. Aprende a realizar los ejercicios Hacer bien los ejercicios es la clave para obtener los resultados deseados y para evitar lesiones. Algunos consejos rápidos: asegúrate de mirar hacia delante a la hora de hacer sentadillas para evitar lesiones en la espalda baja. Al hacer levantamientos de cadera, sostén una toalla o cojín entre las piernas para impedir que las rodillas se doblen hacia fuera y para fortalecer los músculos débiles del muslo. El uso de pesas hexagonales al hacer flexiones de brazos ayudará a aliviar la presión de las manos y las muñecas. 4. No te saltes el estiramiento Es un paso extra que puede ser fácil de olvidar. Si no tienes tapete, compra uno de yoga porque el estiramiento es necesario para recuperarte más rápido de cada ejercicio, para aumentar la flexibilidad y mejorar la salud en general. Las posiciones de descanso son también formas de aliviar la tensión muscular y el dolor después de un gran workout. Además, ¡se siente increíble! 5. Hazle caso a tu cuerpo Cuando pruebes nuevas técnicas para ampliar tu rutina, llévatela con calma y escucha a tu cuerpo. Movimientos bruscos pueden provocarte lesiones como tirones musculares, tendinitis o dolor en la rodilla. Cuando obligas a tu cuerpo para obtener resultados, debes prestar atención a las señales de alerta; mareos, fatiga o dolores extraños son una advertencia de que tu cuerpo necesita descanso. Conoce las mejores recetas de comida en Cocina Fácil para que sigas cuidando tu dieta diaria y tengas una alimentación balanceada.
