¿De regreso a la alimentación saludable? Checa estos malos hábitos que pueden entorpecer tu camino a conseguir la figura de tus sueños
HÁBITO HAMBRIENTO Una simple ensalada a la hora de la comida Los bowls llenos de verduras hacen que tu estómago se sienta lleno. Aunque los carbohidratos repletos de fibra, como los vegetales crudos, son saludables, se digieren más rápido que una comida balanceada que incluye también proteínas, dice la nutrióloga Leslie Bonci. Necesitas de ambos para sentirte satisfecha hasta la hora de la cena. ARRÉGLALO: “Procura consumir diario un mínimo de un gramo de proteína por cada kilo corporal”, aconseja la nutrióloga. Así que si pesas 65 kilos, eso significa que deben ser al menos 65 gramos. Acompaña tu ensalada con camarones (de cinco a ocho grandes= 20 g), tofu (una taza= 20 g), nueces (1/2 taza de nueces picadas= 9 g) o quinoa (una taza=8 g). Ver también: Estudio afirma que las personas que comen pasta son más saludables HÁBITO HAMBRIENTO Ingerir alimentos bajos en grasa De hecho, estos alimentos pueden hacerte comer en exceso. Sin el poder de saciado de la grasa (toma más tiempo digerir todos los nutrientes) y tendrás hambre más rápido, dice el Dr. David Ludwig, autor del libro Always Hungry. ARRÉGLALO: “Revierte esto y come saludable, consume yogur, aceite de oliva y aguacate”, señala el Dr. Ludwig. Puede sonar contradictorio, pero terminarás comiendo menos en general. Y siéntete libre (y feliz) de acabar tu comida con un chocolate amargo, afirma. HÁBITO HAMBRIENTO Pretzels como snacks Parecen inofensivos, pero algunos carbohidratos, como los de los pretzels, pueden digerirse en 15 minutos, convirtiéndose en azúcar para tu cuerpo. “Entonces, no mucho después de comerlos, querrás más”, dice el Dr. Frank Lipman, autor del libro Young and Slim for Life. Y estarás sacando la bolsa de tu cajón. ARRÉGLALO: Elimina el ciclo buscando proteínas, grasas saludables (la crema de cacahuate tiene ambas) y vegetales. Prueba con un plato de edamames hervidos y con poca sal. HÁBITO HAMBRIENTO Comes en el camino Sí, lo sabemos, estás muy ocupada, pero cuando llevas alimentos a tu boca mientras haces otras tareas es muy fácil sobrealimentarte. Tu cerebro necesita 20 minutos, después de tu último bocado, para registrar que estás llena. ARRÉGLALO: Pon en tu teléfono un temporizador de 10 segundos cada dos minutos y haz una pausa mientras suena la alarma, sugiere la nutrióloga Cynthia Sass. Antes de pedir otro plato, dale 20 minutos a tu cerebro para decidir si aún tiene hambre. Cosmo recomienda: ¿Qué es y cómo funciona la alimentación intuitiva? Snacks: ¿Qué y cómo comer para acelerar el metabolismo?
