La falta de deseo es uno de los trastornos sexuales más comunes entre mujeres de todas las edades.
Un estudio que consideró las experiencias en más de 40 mil mujeres arrojó que 44.2% de ellas tenía un nivel bajo de libido y excitación o dificultades para llegar al orgasmo. Asimismo, la investigación, publicada en Obstetrics & Gynecology, señaló que solo el 10% de las participantes, entre 18 y 44 años, sufría Según los expertos, la falta de interés de las mujeres en el sexo puede afectar negativamente el sentido de bienestar y causar frustración, disminución de la autoestima y dificultades en las relaciones.
Las que siguen son técnicas que han mostrado incrementar las ganas y disponibilidad para el sexo. Antes de aplicarlas, es importante aclarar que estas estrategias son útiles cuando la disminución de deseo se debe a estrés, problemas de imagen corporal o tiempo y espacio para el asunto. Si tienes algún conflicto mayor con tu pareja, es mejor platicarlo y no ?taparlo? con trucos.
Reconexión con tu cuerpo
Sentirte bien contigo misma y creer que los demás te ven bajo una luz positiva mejora la experiencia sexual y aumenta la libido. ?La baja autoestima indica que no estamos suficientemente centradas y si no lo estamos no podemos tener una conexión honesta y energética con una pareja.
Técnica 1: poda ese ?césped?
Según un estudio entre casi 2,500 mujeres, publicado en el Journal of Sexual Medicine, las chicas que depilan por completo su vello púbico tienen una imagen más positiva de sus genitales, suelen mirarlos más de cerca, poseen una mejor función sexual y reciben más sexo oral.
Técnica 2: entrena un poco más duro
El ejercicio es la herramienta física y psicológica más importante para volver a sentirte bien con tu cuerpo y re energizarte en general. Pero, además, tiene influencia directa en las ganas de sexo. Los entrenamientos aeróbicos son clave para que la sangre fluya a los órganos sexuales y estos se revitalicen. Con esta meta en mente, prueba una serie de 12 repeticiones extras del ejercicio que creas te conviene más según la parte de tu cuerpo que deseas mejorar.
Técnica 3: pornomotívate
Sin has pasado un tiempo considerable sin ganas de sexo y crees que nada te pondrá de humor, haz la prueba de mirar videos eróticos. Para Blakeway, mirar porno es un arma de doble filo: si se usa para crear más conexión (con tu propio cuerpo y excitación si estás sola; con el cuerpo y el deseo del otro si compartes la experiencia) es benéfico, pero a veces puede ser un distractor y drenar tu vitalidad. La indicación de la experta es usarlo con moderación.
