La respiración es una técnica maravillosa para poder volver a ti; continúa leyendo para saber en qué momentos es necesario tomar un respiro.
Hay instantes en los que debes detenerte a pensar y respirar para analizar cómo reaccionar a ciertas situaciones. El oxígeno es un elemento que le ayuda a nuestro organismo a la gran mayoría de sus procesos, pero no solo eso, también te da la oportunidad de regular tu sistema nervioso para lograr relajarte, por tal motivo, es indispensable que tomes un respiro antes de reaccionar a determinados acontecimientos.
Momentos difíciles en los que debes respirar
Cuando no sabes lo que sientes
Una buena forma de empezar a identificar tus emociones es tomando un respiro; así le das oportunidad a tu cerebro que comience un proceso de relajación, por lo tanto, no hay posibilidad alguna de cometer errores y lograrás ser sincera contigo misma.
En un arranque de ira
Hay instantes en los que el enojo se apodera de ti y es prácticamente imposible que los sentimientos negativos desaparezcan; ¡no entres en crisis!, tómate un momento y respira tres veces profundamente para eliminar poco a poco la ira; tendrás que tener paciencia porque recuperar el control no será fácil, pero una vez que lo haces, te sentirás bien por haberlo logrado.
Cuando sientas mucho estrés
Lamentablemente el estrés y los ataques de ansiedad se han vuelto parte del día a día de muchas personas; en ocasiones, hay pensamientos negativos que invaden tu cabeza, una buena forma de controlarlos es tomando un respiro para lidiar con esos malos ratos.
Antes de decir un insulto
Seguramente te ha pasado que alguna persona no te cae bien e inevitablemente deseas decirle todos los defectos que consideras que posee; antes de hacerlo, detenté para pensar en las consecuencias que tus palabras pueden traer. ¡Toma aire para seguir adelante!
En una crisis de llanto
A veces tenemos tantos dolores guardados que, evitar una crisis de llanto, es prácticamente imposible; lo único que es recomendable es comenzar a trabajar en tu respiración para que pronto termine ese momento y logres calmar a tu inconsciente con un respiro.
¡La respiración es la cosa más hermosa que puede existir!, ya que nos obliga a hacernos conscientes de los procesos tan maravillosos que nuestro cuerpo es capaz de hacer, de forma automática para darnos vida; utiliza este poder a tu favor para tranquilizarte.