El placer en pareja o en solitario no tiene límites con esta novedosa practica que te hará disfrutar orgasmos durante más tiempo y con mayor intensidad, si aún no la conoces ¿qué esperas?
Reavivar la llama del amor y la pasión parece una tarea imposible después de pasar mucho tiempo con la misma persona, sin embargo, actualmente hay muchas posibilidades para explorar una mejor y más plena vida sexual a solas o con tu persona especial, de hecho, el edging pertenece a esta nueva escuela de prácticas sexuales no riesgosas que te permitirán intensificar tus orgasmos y los de tu pareja.
Esta práctica consiste en retener el orgasmo a través de algunos tips a los que debes poner atención si quieres ser un mejor amante y contar con mejores referencias.
¿Qué es el edging?
Antes de entrar en materia, queremos que sepas exactamente a qué nos referimos cuando hablamos de edging. Aunque no existe una traducción literal, edging se refiere a llevar algo al límite, precipicio o borde por lo que, adaptado al idioma del amor, edging se refiere a la práctica de llevar al placer al borde del precipicio, pero sostenerlo ahí para posteriormente, dejarlo fluir.
Este control del orgasmo te ayudará a sentir de una manera más intensa cuando tú y tu pareja decidan dejarlo llegar, por lo que una vez que estás a punto de experimentar el máximo placer, es necesario que ambos bajen el ritmo casi a cero para volver a encarrerarse en el camino del placer.
Además de tener el control psicológico de las emociones en el momento del climax, el edging te permite acumular sangre en la zona pélvica y genital para generar una mayor sensibilidad. El resultado es un clímax más intenso y un momento de liberación que produce orgasmos más placenteros.
Consejos para mejorar progresivamente el edging
El principio del que parte el edging es la comunicación, si tú y tu pareja no están enterados de lo que está sucediendo es muy probable que esto no funcione, además dar explicaciones durante el momento previo al climax suele cortar la inspiración, por lo que te sugerimos que lo hablen antes de llevarlo a la práctica para que implemente una palabra o señal justo en el momento crucial y ambos bajen el ritmo.
Edging paso a paso
- Empiecen por el principio: la estimulación, recuerda que los previos son igual de importantes que la tercera base, así que no los dejes de lado, se trata de disfrutar cada etapa coital.
- Cambien el ritmo: es muy probable que, si es la primera vez, la eyaculación o el orgasmo lleguen precipitadamente, sin embargo, deben implementar juntos una señal para detenerse un poco y retrasar la llegada del climax.
- Permitir que el placer se acumule: bajarse del climax cuantas veces sea necesario para que ambos alcancen el máximo nivel no sólo será de las relaciones más placenteras, sino que, además, los unirá en un lazo emocional inquebrantable ya que esta práctica requiere de mucha confianza y comunicación.
Si no logras detener el climax, toma nota a estos tips:
- Piensa en otra cosa: si te concentras exclusivamente en el placer que estás sintiendo es muy probable que no puedas contenerlo, así que piensa en otra cosa y prolonga la sesión durante más tiempo.
- Cambien de posición: además de romper la rutina, cambiar de posición también te dará tiempo para relajarte un poco y postergar la llegada del orgasmo, concéntrate y no pierdas el control.
- Primero hazlo en solitario: sin duda, se obtiene un mejor desempeño en pareja cuando ya conoces tu cuerpo, tus tiempos, tus intensidades y preferencias durante el dulce acto del amor. Por ello, y como cualquier otro ejercicio, es importante que primero lo pongas en practica a solas y perfecciones la técnica antes de quedarle mal a tu persona especial.
