Al parecer la tinta se ha convertido en una adicción para el cantante
El cantante canadiense Justin Bieber ha mostrado este jueves su tatuaje número 52 en Instagram, un par de alas que adornan la parte de atrás de su cuello.
“Nuevo tatuaje”, escribió junto a una imagen en la que se le ve de espaldas mirando un espejo.
Su nuevo grabado va acorde con sus extravagantes gustos, los mismos que le llevaron a pagar recientemente 50.000 dólares por pasar dos noches en la Mansión Versace, en Miami, propiedad de más de 2.000 metros cuadrados, con una piscina de 15 metros revestida en oro de 24 quilates y un lujoso baño de mármol italiano por cada habitación.
La suite en la que se hospedó Justin -normalmente reservada para Donatella Versace- cuenta con una cama doble con sábanas de lino egipcio, como el resto de camas de la villa.
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Menos placentera fue su estancia en Londres el pasado domingo, ya que tras dar una actuación y salir de copas por la capital inglesa, una de las cuatro chicas con las que había vuelto a su hotel sufrió un ataque de histeria a altas horas de la madrugada que le llevó a llamar a la policía.
“La noche estaba yendo de maravilla para Justin, había ido a un par de clubs y había acabado volviendo al hotel con cuatro chicas que había conocido. Pero después de pasar un rato en su habitación de hotel, una de ellas tuvo una crisis importante. Llegó en la recepción descalza y montó un numerito. Fue poco después de las seis de la mañana, así que como imaginarás, causó un gran alboroto. Estaba diciendo: '¿Dónde está mi amiga? ¡Voy a llamar a la policía!’. Está claro que se había pasado un poco esa noche, y acabó llamando a la policía”, contó una fuente cercana a un periódico.
Por su parte, la policía confirmó que aunque sí fueron llamados al hotel, no hablaron en ningún caso con el canadiense.
