Cuando se habla de placer masculino, muchas personas piensan que toda la sensibilidad está en el glande, la punta del pene. Aunque esta zona es muy importante, no es la única fuente de placer. Entender esto puede transformar la manera en que vemos y exploramos el cuerpo masculino.
Es cierto que el glande es una de las zonas más sensibles del pene, con alrededor de 4,000 terminaciones nerviosas, lo que lo hace clave para el placer. Sin embargo, centrarse solo en esta parte limita las posibilidades, ya que el cuerpo masculino tiene muchas otras áreas que también pueden generar sensaciones placenteras.
Creer que el placer masculino se limita al glande puede reducir las posibilidades de exploración y disfrute en pareja. Conocer las diferentes zonas sensibles del cuerpo masculino les permite conectar con su cuerpo y descubrir nuevas formas de placer.
En resumen, no es cierto que los hombres solo sientan placer en el glande. Aunque esta zona es muy sensible, otras partes como el resto del pene, el perineo y los testículos también son importantes en su experiencia sexual. Explorar estas áreas puede llevar a encuentros más placenteros y una conexión más íntima.
