En el amor, muchas veces las cosas se pueden poner confusas. En especial cuando ya no se siente igual; ahí es cuando las preguntas empiezan a invadir nuestra cabeza y nos hacen dudar si realmente seguimos enamoradas o simplemente la costumbre se apoderó de nuestra relación.
Aunque un test no es una consulta con tu psicóloga, puede ser la manera “despreocupada” de abordar el tema sin sentirte abrumada.