En todas las parejas llega a haber momentos vergonzosos, aprende a salir del paso con esta guía
Cada pareja tendrá una situación incómoda de vez en cuando. Lo que importa es saber cómo manejar la situación.
Hablamos con Judy Kuriansky, autor de La guía del completo idiota en citas, quien nos dio consejos para algunos de los dilemas más comunes.
Una flatulencia tuya
Ríete, pero con mesura. Claro que lo ideal sería que tu chico piense que eres perfecta al 100 por ciento, pero así no funciona la vida real.
Deja que ambos rían un poco de la situación y pasa a otra cosa pronto. Él pensará que eres humana y tú volverás a sentirte cómoda.
No te presenta como su novia
Espera a que estén solos para confrontarlo, si lo haces en plena fiesta o delante de los demás las cosas pueden complicarse. Una vez a solas (y que a ninguno se le hayan pasado las copas), pregúntale al respecto.
La clave está en no confrontarlo ni hacerlo sentir atacado, que sea una conversación tranquila, que él entienda tu incomodidad sin acusarlo.
Puedes plantearle algo cómo: "¿cuándo vayamos a alguna reunión con mi familia cómo debo presentarte?, ¿cómo te sientes cómodo presentándome a mí?”.
Él se enferma de algo desagradable
La primera vez que alguno se enferma en una relación puede ser una dura prueba. A los chicos les da por ignorar los síntomas y tratar de aguantar.
Así que si tu novio amanece con una fiebre extraña, trátalo con amabilidad y te dirá qué necesita o quiere. Haz lo que pide, pero no te excedas en atenciones que puedan incomodarlo.
Él dice “te amo” y tú no estás lista
Dale un beso muy grande y dile que te hace sentir de maravilla. No expliques tu falta de respuesta, a menos que te lo pregunte directamente, porque se va a sentir como si le estuvieras dando excusas.
Si él pregunta si no estás allí todavía, dile que te acercas todos los días. Déjale claro cuánto te importa, aunque es probable que se sienta algo decepcionado.
Tú acomodas y él desordena
Pídele tener una conversación acerca de los límites, dile: “hemos estado juntos por tanto tiempo y, si estuvieras en mi lugar, ¿te gustaría hacer algo para facilitar las cosas?”.
Explícale que es necesario que compartan la responsabilidad de mantener orden y que pueden hacerlo juntos, así no sentirá que le estás imponiendo un espacio.
Tu abuela pregunta cuándo se casan
Ríe y luego cambia de tema. Haz una broma si crees que él se sentiría cómodo: "¿qué te hace pensar que no estamos ya casados?”, por ejemplo.
Si lo dejas sólo en risas, agrega que no tienen prisa, sonríele a tu chico en señal de disculpa y cambia de tema.
Él puede incomodarse en el momento, pero se trata sólo de un breve malestar y es mejor que tratar de explicar por qué no han hablado al respecto todavía y un sinfín de cosas que no vendrían al caso.