Las mentiras que nos decimos al tronar

Las mentiras que nos decimos al tronar

Te compartimos los auto-engaños más comunes después de cortar con nuestro ex

¿Qué será lo que nos pasa que, cuando terminamos una relación, comenzamos a ver sólo las cosas buenas de nuestro ex? Estar en ese momento de tristeza, cuando pasan los días después de decirle “adiós” a la pareja, nos envuelve en un tornado emocional lleno de confusión en el que no nos calienta ni el sol. ¡Cuidado! Puede convertirse en una telaraña que esconde la realidad.

Los auto-engaños post truene

1. No era tan malo como parecía: ¡Tí-pi-co! El tipo era un patán que te tenía sufriendo los fines de semana esperando a que llamara, era el último que te felicitaba en tu cumpleaños, iban al antro y no te pelaba en toda la noche por platicar con sus amigos, y sólo nos acordamos del único día que nos llevó flores (unas rosas que le mandaron a su mamá que estaba de viaje).

2. Jamás voy a volver a tener novio: ¿Poooooor? Ése es uno de los peores pensamientos que podemos tener, pero que, al estar solas, nos decimos día y noche. El ego está lastimado y nos sentimos el bicho raro. Como si ese hombre nos hubiera hecho un favor al estar con nosotras. Dejamos de vernos y basamos nuestro amor propio en la opinión del otro. No olvides que eres una mujer valiosa, con cualidades que te hacen ser especial; ya llegará esa persona que te impulse a brillar aún más.

3. Es el hombre que más me ha querido: ¡Sí, ajá! El chico se la pasaba viendo a cuanta mujer le pasaba por enfrente sin importarle que estuvieras a su lado, se enojaba y gritaba peor que Hulk cuando se pone verde, o desaparecía días enteros sin un sólo whatsapp para dar señales de vida, apareciendo después, con un choro de que su abuela había estado enferma y él la había cuidado como el tierno nieto que era (¿le crees? Yo no). El amor es compartir y hacer sentir a la otra persona el ser más especial del universo.

4. Mi familia lo adoraba, fue mi culpa y lo eché a perder: ¡Jamás la opinión de los demás va a ser más importante que la tuya! Acuérdate, sólo TÚ vives la relación. Claro que es básico tener armonía con la familia, amigos y pareja, que convivan fluyendo las cosas increíblemente, pero al final del día, todos pueden amar a tu novio y tú no sentir que el mundo se detiene cuando te da un beso o él volverse el más agresivo cuando están solos. Al romper una relación, buscamos reafirmarnos en las opiniones externas. Obviamente si nos dicen que somos el colmo por haber dejado ir a ese “gran partido”, nuestra seguridad se va al piso. Créeme, con el tiempo verás que hiciste lo correcto.

5. Nuestra química sexual era única, no volveré a sentir lo mismo con otro: ¡Falso! Ok, acepto que hay+ hombres con los que puedes sentir que en esos momentos de pasión, tocas el cielo y llegas a puntos que no pensabas que existían, pero de ahí a que no puedes sentirlo con nadie más, es un mundo de diferencia. El placer lo decides tú, está en ti, en tu mente y tu cuerpo (si ves el techo esperando a que acabe o tienes un éxtasis absoluto). Ten por seguro que habrá otros con los que experimentes esa química e incluso, sea mejor todavía.

No olvides que el tiempo no lo hace cambiar, ¡nos hace olvidar!