Sigue estos consejos y dale energía a tu cuerpo sin necesidad de una taza de café.
Toma una siesta ¿Recuerdas la adenosina? La cafeína solo bloquea este químico del sueño de manera temporal. Sin embargo, una siesta elimina por completo la adenosina. Tus niveles de este químico se reducen cuando duermes, con lo cual tu cerebro se siente más alerta y potencialmente más concentrado al despertar. Muévete La acumulación de adenosina envía el mensaje ?desacelerar? a tu corazón y vasos sanguíneos. El resultado: una disminución en el flujo de oxígeno con lo cual te sientes aflojerada o totalmente agotada. Dale una vuelta a la cuadra o a la oficina caminando rápido; incluso muévete de un lado a otro mientras hablas por teléfono para que la sangre fluya. Abre las cortinas Es hora de ver la luz. Cuando el sol de la mañana da en tus ojos, le dice a tu cuerpo que se despierte y ayuda a programar tu reloj interno para el resto del día. No es necesario que te la pases viendo el cielo, simplemente exponte a la luz natural, incluso si el día está nublado.
